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Vengo a escribir para actualizar la vida de nuestro chico, que... si habéis leído publicaciones anteriores, sabréis de qué chico hablo.
La vida de este chico ha dado un giro importante, para increíblemente bien, las noticias son buenas en su vida profesional y emocional, ha conseguido avanzar en la vida que espera tener y se siente feliz. En la familia, tengo que decir, que las cosas no van especialmente bien y necesitamos más fuerzas que nunca, y cuento, hace seis años, a su padre le diagnosticaron cáncer, lo tenía avanzado, pero no lo suficiente como para pararlo relativamente a tiempo. Es casi seguro, que sea metástasis y que el hígado lo tenga afectado. Esta es la parte más horrible de todas. Tanto su familia como él tienen un miedo que les come por dentro, necesita más fuerzas que nunca y luchar, mucho y muy fuerte, luchar hasta que desaparezca o se estabilice el cáncer. Su padre tiene días, normalmente está bien, pero otras no. Ellos se mantienen unidos, tienen días de flaqueza, pero saben que merece muchísimo la pena vivir y que nada ni nadie acabará con ellos, por eso hay que luchar. En general, hay que luchar por amor a la vida.
Al chico le va bien, ha conseguido estabilizarse emocionalmente y tener claro qué quiere y qué siente y saber retirarse de lo que le hace daño aunque a veces le cueste e intente comprender.
Hay otra cosa más, y es que sus relaciones de amistad se están desestabilizando, cada vez están más tensas, y cuento: al chico le ha vuelto a salir la oportunidad que le salió hace 2 años en Alemania, no ha dejado de salirle desde la primera vez, la ha rechazado 3 veces porque era fuera de aquí y no puede costearse un curso de alemán fuera de su ciudad de residencia, pero es que esta vez le ha salido de tal manera, que está en su ciudad de residencia y con otras condiciones mejores. ¿Qué ocurre? que sus amigos piensan que se lo están timando, que la empresa es un timo, sobre todo su mejor amigo, con el que hace una semana tuvo una discusión fuerte porque él se estaba pensando si definitivamente aceptar o no la oferta. Ha pasado una semana y aún no le ha comunicado la decisión, cosa que no va a hacer hasta que lo considere oportuno, es decir, el día que tiene concertada la cita con la empresa en cuestión. Posiblemente, tendrán otra discusión del mismo calibre que la de hace una semana, y no sabe hasta qué punto va a tener fuerzas para llegar a un acuerdo sensato, hará lo que pueda y hará con la oferta lo que crea que debe hacer, le pese a quien le pese, y lo tiene claro, más que nunca, le da igual que se equivoque, ¿cuándo si no ahora?
Saludos y gracias por leer.